Edixon Perea marcó la apertura a los 9 minutos. A los 19 igualó Hernán Crespo de penal, y a los 33 Riquelme, de cabeza, marcó la diferencia, que acrecentó el propio Riquelme de tiro libre a los 45. En el segundo tiempo descontó Castrillón y Diego Milito aseguró el triunfo sobre el final.
La Selección Argentina está haciendo un axiona de aquello que dice el tango, “primero hay que saber sufrir...” Porque al igual que contra Estados Unidos, el equipo salió con muchas indecisiones y dudas. Se vio superado por una selección colombiana que quiso poner coraje para anular el mejor fútbol de Messi y compañía. Por eso, metió pierna fuerte en la mitad de cancha y se preocupó por anular el circuito futbolístico entre Riquelme, Verón y Messi, dejando aislado a Crespo. Y cuando Argentina no llegaba, Colombia se adelantó en el marcador al desviar Edixon Perea, de taco, un remate de Ferreira que había sido habilitado con inteligencia por Vargas al ejecutar un tiro libre. Primer dolor de cabeza (en el partido, claro) por pelota parada. Pero está visto que estos contratiempos sacuden a nuestro equipo, lo hacen reaccionar y le permiten poner sobre la cancha la supervalía de varios de sus jugadores. Y en la primera contra de Messi, que fue incisivo, peligroso y desequilibrante, el jugador del Barsa fue bajado en el área por un defensor colombiano. Penal y la ejecución recta y violenta de Hernán Crespo, para lograr el empate. Pero en ese remate el goleador sufrió un tirón (luego se confirmó que fue desgarro) y debió ser reemplazado por Diego Milito. A partir del empate, Argentina siguió buscando, tal vez sin las sutilezas que podían esperarse del equipo, pero con un amor propio y una contudencia que poco iban a tardar en concretarse. A los 33, Messi habilitó “de memoria” la subida de Zanetti que mandó un centro endiablado que Riquelme conectó al gol con un cabezazo junto al palo izquierdo de Calero. Siguió dominado la selección de Basile y cuando al período no le quedaba nada, un tiro libre ejecutado julosamente por Riquelme posibilitó el 3-1. La pelota se le coló a Calero por el mismo lugar donde había ingresado el segundo gol. El comienzo del segundo tiempo prometió una fiesta futbolera, porque Argentina, de la mano de Riquelme, se cansó de tocar y crear opciones que no supo concretar. Y de repente, pasados los 15 minutos, el equipo se paró. Sólo quedaron “en actividad” Mascherano, recuperando todo en la mitad de la cancha, y Riquelme aportando creatividad del medio para adelante. Colombia aprovechó la ocasión y cargó con más ganas que fútbol. Y llegó al descuento cuando Castrillón conectó de cabeza un córner (segunda amargura por pelota parada)que Abbondanzieri no pudo retener y casi llega al empate con un envío bombeado desde larga distancia cuando el “Pato” estaba adelantado, que el arquero en supremo esfuerzo logró desviar al corner. Los últimos minutos recrearon el “saber sufrir” del comienzo del partido, porque Argentina no podía salir de su campo, pasaba mal la pelota y mostraba serias dudas en defensa. Pero esta vez salió el tiro del final. Fue cuando Diego Milito (a los 46’) conectó un disparo que se desvió en un defensor colombiano y le pasó por encima a Calero. Final para un triunfo valioso más por lo anímico que por lo futbolístico. La selección supo aprovechar sus momentos y ganó. Y también clasificó para los cuartos de final. El jueves, contra Paraguay, intentará ser el mejor del Grupo C. El viaje a Barquisimeto: Tras este importante triunfo, la delegación partirá este martes a las 15, en vuelo charter, rumbo a Barquisimeto, ciudad en la que el jueves próximo enfrentará a Paraguay. El plantel se entrenará por la tarde, apenas llegado a dicha ciudad.
Grande la sele Argentina... vamos pibes a ganar la copa américa!!!
Fuente: afa.org.ar
